En lo prohibido {Fanfic} {Capítulo 6}

Disclaimer: El grupo se pertenece a sí mismo como a su agencia. Historia ficticia creada por mí. Si tiene algún parecido con otro fic, es solo coincidencia. Esto es sin ánimos de lucro.

Nota de la autora: Lo que tanto esperan algunas; la actualización de este fic xD! Siento mucho que me haya tartado miles (solo exagero) de días, pero ya saben, a veces uno no sabe como continuar y se queda atascado… ;w; Grandiosamente me salió la inspiración de un día para otro (lo cual es genial para mí porque quiero escribir otros fics xD) y aquí les traigo :B

Espero les guste y comenten que les ha parecido ^^ ♥ Quiero a todas las lectoras que siempre pasan a comentar en este y en mi otro fic 2Seop «My Only Possession…». ♥♥

 

Capítulo 6

La película había terminado y Kevin no volvía. Kiseop salió de la sala y se dirigió al baño, tal vez estaría ahí… Pero no, habían pocos chicos y ninguno parecido a Kevin… Entonces se había ido. ¿Que debía hacer? ¿Llamarlo y decirle que lo perdonara, que no volvería hacerlo? Pero si él quería que esto pasara… ¿Por qué se fue? A decir verdad, no fue tan malo… ¿Se habrá sentido avergonzado? Bueno, le daría tiempo al tiempo. Quizás y solo sean imaginaciónes suyas.

Kiseop salió del cine con su popcorn y bebida, ni loco para dejarlo ahí y sin tomar, ni comer. Los puso en una bolsa que milagrosamente había llevado por si acaso. Quería pasar toda la tarde en la calle para no tener que aburrirse en casa… Pero que más daba, iría a casa de su abuela. Quería saber que novedades habían por la semana que no fue. Se subió al autobús que justo pasaba por ahí y se permitió no pensar en nada, al menos por el resto del día…

AJ aún estaba en la preparatoria. Eran las 02:16 pm y no saldría hasta después de las 05:25 pm. No sabía por qué pero estaba ansioso de lo que podría pasar el día de hoy.

─Hey, AJ ─lo llamó Hoon pero no hacía caso, estaba muy pensativo ─. ¡Hey, gato diabólico! ─y solo eso lo hizo reaccionar.

─¿Cómo me llamaste? ─AJ achinó los ojos.

─Gato…hermólico…

─¿Gato hermólico? ¿De dónde has sacado eso? Ni siquiera significa algo en concreto ─preguntó Soohyun extrañado.

─Algo por ahí tiene que haber visto que tiene la mente llena de palabras raras ─aseguró el gato.

─Nah, solo es una combinación de palabras ─aclaró Hoon ─. Además, parecieras que estuvieras ido… ¿Te fumaste algo? ─preguntó sin tapujos.

─¿Crees que me fumaría algo aquí, idiota?

─Pues estás raro últimamente. Tal vez, estás pasando por la rebeldía ─aseguró Hoon.

─Quizás sea la edad del pavo ─AJ miró furioso a Soohyun ─. Ah, no. Solo debe estar pensando en el juego del otro día, ¿verdad?

─Ahora que hablas de eso… No lo he jugado…

─¿Y por qué no? Yo te di el dato, lo pasas en un santiamén. No queda mucho por finalizar.

─Es que no tengo PlayStation. Un SEÑOR lo rompió cuando se quedó en casa a dormir UN día ─enfatizando las palabras porque se refería a Soohyun.

─Ups, lo siento. Se me había olvidado eso ─pero una pregunta llegó a su cabeza… ─. ¿Y cómo lo has jugado entonces?

─En casa de mi primo… Pero no he ido ahora, no quiero estresarlo más de lo que está ─eso es lo que AJ suponía.

─¿Estresarlo…? ¿De cuáles de tus primos estamos hablando? ─y Soohyun lo preguntaba porque sabía que AJ pertenecía a una inmensa familia. Una familia que no le importaba el incesto siendo primos o hermanos o tíos, ya que se saben de casos de años muy lejanos.

─De Kiseop…

─¡Oh! ¡El bello Kiseop! ─exclamó Hoon emocionado. Al gato le molestaba esa expresión, porque sabía que por una parte al conejo le gustaba su primo… Desgraciado…

─Sí, él ─afirmó enojado, más bien celoso.

─¿Y qué le pasó? ─interrogó su otro amigo.

─Lo despidieron… Bueno, renunció, junto con mi tía. Ella ya tiene trabajo pero mi primo aún no.

─¿Y está estresado por eso?

─Pues, yo creo que sí. No lo he visto en días ─encongió los hombros.

─A lo mejor está saliendo con alguien… ─comentó Hoon tristemente.

Entre ellos supieron que Hoon había invitado a salir a Kiseop pero fue rechazado por este. ¿Motivo? Quizás porque en realidad si era hetero y no gay, como otros le decían. Pero por su aspecto de casi chica, era realmente deseado por varios, y entre ellos, estuvo Hoon.

Él no quiso desaprovechar la oportunidad de tener una cita con Kiseop. Oportunidad que se fue por el retrete…

AJ odiaba escuchar sobre eso. Antes no le importaba pero ahora se le pasarían millones de cosas por la cabeza. Hasta ese amigo con el que lo vio el otro día.

─No, no creo. No tiene novia ni nada por el estilo -aseguró AJ confiado.

─Bueno, tú eres su primo solamente, no su padre como para saber que le pasa por estos días ─dijo Soohyun ─. Además, tiene veinticuatro años, quizás es momento de que haga su familia desde ahora.

─¿Y qué sabes tú? ─cuestionó AJ molesto.

─Yo solo decía… ─suspiró este.

Justo en ese momento se escuchó el timbre del término de la colación. Soohyun se había salvado del puñetazo seguro que recibiría de AJ.

De aquí ya no habían recesos. Así que frustrados por la próxima clase, se levantaron y dirigieron a su aula.

La tarde pasó rápidamente y todos iban de regreso a sus hogares. Uno en especial, estaba ansioso por llegar a casa de su abuela. Rápidamente subió al bus que se aproximaba en su camino y solo esperó para poder bajarse e irse corriendo hacia la puerta para entrar a la casa, saludar a todos los presentes y luego, preguntar por Kiseop. Su abuela le dijo que estaba durmiendo en la habitación de invitados, que había llegado cansado y un poco deprimido.

¿Deprimido? Se preguntó el gato en ese momento. Quizás no le había ido bien en los trámites que tendría en el día.

Sigilosamente fue a la habitación y abrió la puerta. Ahí estaba. Podría definirlo como un bello durmiente. Sin duda era hermoso. Sus facciones eran totalmente atrayentes ahora y para que negarlo, lo deseaba con todas sus ganas. En ese momento se preguntó el por qué pensaba así, cuando era tan poco el tiempo que había probado esos labios que ahora dejaba salir pequeños suspiros.

Se acostó a su lado, habiendo un espacio en la pequeña cama. Kiseop había suspirado profundamente y se volteó quedando frente a frente con AJ. Claro que no se daba cuenta, pues aún estaba dormido.

Por otro lado, AJ era el más feliz en este momento. Viendo su rostro, miraba sus pestañas, su nariz, sus labios… Sentir el pequeño aire que exhalaba por la nariz perfectamente estilizada y moldeada. Quería besarlo pero por otra parte, no quería interrumpir el pequeño sueño…

Un tope de labios sería suficiente, ¿no?

Se acercó y rozó esos perfectos labios pensando que el otro estaría durmiendo… Estaba equivocado…

─¿Qué haces? ─preguntó Kiseop aún adormilado.

─Bueno… solo te ví así y no me pude resistir ─confesó el gato.

─Típico, ¿no? ─el ahora despierto, abrió sus ojos pestañeando ligeramente ─. No me mires así, ¿quieres? ─AJ no se perdía cada movimiento de Kiseop, claramente hipnotizado por su belleza.

─Lo siento. Como te dije antes, no me pude resistir ─sonrió.

─¿Qué quieres? ─Kiseop fue sin rodeos.

─Solo preguntar cómo estás. La abuela dijo que llegaste triste o deprimido, algo así ─AJ vió como su primo rodaba los ojos.

─Como siempre, mi abuela ─dejó escapar con pesadez ─. No pasa nada, si es que con eso te quedas tranquilo ─lo miró por un instante y volteó hacia la pared de la habitación.

Kiseop no quería ver a nadie, ni al gato. Quería estar solo y pensar con tranquilidad, lo que había pasado el día de hoy. Tampoco que AJ le comenzara a reclamar cosas de niños, porque no estaba para eso en este momento.

─No te creo ─y ahí comenzaba de nuevo.

─Déjame solo -para AJ fue algo muy duro de escuchar aquellas palabras.

Antes, el que no quería acercarse, era él. Y ahora que estaba cerca, Kiseop lo pretendía alejar. No lo entendía.

─Kiseop…

─Que me dejes solo, AJ. Hoy no quiero escuchar berrinches tuyos y ya obtuviste lo que querías, ¿no? Así que déjame solo.

─Por la mierda… ─susurró por lo bajo, hastiado de esa actitud. Pero que le iba hacer, Kiseop tenía su carácter y esta vez pensaba ganar nuevamente ─. Estuve esperando todo el puto día para poder verte y me recibes con esa actitud prepotente ─lo volteó a regañadientes pero tenía más fuerza que su primo ─. Una semana, Kiseop, prácticamente una semana esperando para verte y actuas como si nada conmigo ─le reclamó.

─Otra vez con lo mismo, AJ ─dijo frustrado ─. ¿Quieres que te pida «por favor», para que me dejes tranquilo?

─Quiero que me digas por qué estás deprimido.

─Ok, ok. De ahora en adelante, hablaremos con la verdad, ¿te parece? ─AJ asintió ─. Bien. Después de esto no quiero que te estés quejando como niñato porque ya vas a cumplir dieciocho en pocos días ─AJ volvió a asentir ─. Está bien… ─Kiseop suspiró profundamente ─. Tuve sexo en el cine. ¿Contento?

La mitad de eso era verdad, la otra solo una mentira para que su primo menor no intentara algo más.

AJ se sorprendió ante esa confesión. No supo en que lugar quedaba lo deprimido de su primo; pero, a parte de eso, creía saber que Kiseop era totalmente virgen… aún…

─Eres un mentiroso.

─¿Ahora soy mentiroso? Por Dios… ─Kiseop sabía que AJ no se quedaría tranquilo con eso.

─¿En serio tuviste sexo?

─Te estoy diciendo que sí, AJ.

─¿Con quién?

─Con Kevin.

─¿Quién es Kevin?

─Mi amigo.

─¿El del otro día?

─Sí, el del otro día. ¿Feliz? ─intentó levantarse de la cama, pero AJ se lo impidió ─. No hagas nada de lo que te vayas a arrepentir, gato gruñón ─este no le hizo caso y lo recostó para luego abrirle las piernas y quedarse en medio de estas ─. No hagas nada de… ─y lo besó.

Este era un beso de igual intensidad como el de las primeras veces… Era necesitado, ansiado, esporádico y sabroso, así lo percibió Kiseop después de unos minutos. Su preocupación no era que estuvieran así casi rozándose sobre sus pantalones y besándose con fugor: era la familia.

En casa de la abuela, todos entraban y salían como si nada. El único lugar privado era el baño, pero Kiseop no pensaba ni siquiera entrar a uno. Así que como pudo, alejó a AJ poco a poco.

─AJ, no aquí ─pidió mientras miraba la puerta de la habitación.

─No entrará nadie, todos piensan que estás durmiendo.

─Pero tú no ─le golpeó el pecho ─. Es mejor que salgas.

─No quiero… ─y rebelde como él mismo, movió sus caderas haciendo que sus miembros revestidos fueran tocados como aquella vez en el baño. Kiseop gimió bajo ante los siguientes movimientos que realizaba AJ. Se estaba excitando de nuevo.

─AJ, por favor…

─Por favor qué… ─arremetió nuevamente, excitándose él también.

─Alguien nos puede ver. No seas testarudo y hazme caso… Ahhh ─se tapó la boca para no tener que hacer otro sonido más ruidoso y despertar sospechas en los que estaban presente en esa casa.

AJ siguió con sus movimientos; ambos respirando agitadamente, hasta que escucharon golpear la puerta. Los dos no sabían que hacer.

─Maldición. Te dije, AJ ─Kiseop regañó bajito.

─Tú solo cállate y espera a que se vaya.

─¿Y cómo quieres que me calle, si…? ─el gato tapó su boca con una mano.

Los golpes siguieron pero al no recibir respuesta, se detuvieron. Después de unos segundos más, AJ empezó a moverse nuevamente, sin importar que Kiseop le regañara aún teniendo su mano en esa boca.

Kiseop se agitaba cada vez más y otra vez quería gemir alto, pero no podía; por miedo a ser descubiertos. Abrió sus ojos y miró los de su primo que parecía tan compenetrado con ese momento y verlo así, algo le decía en su mente que debía aceptar lo que le estaba ofreciendo.

Lentamente, sacó la mano que obstruía sus labios y se acercó ligeramente para topar los labios del otro y recibir por respuesta, besos ansiosos nuevamente.

─Mmhhh… AJ…

─Dime… ─dijo al momento de repartir besos en su rostro y cuello.

─Más rápido… ─Kiseop escuchó la pequeña risa de su primo y éste aumentó la velocidad de sus embestidas. Esto era como sentirse en el cielo, si es que no era otra cosa.

AJ se alzó un poco para mirar el rostro excitado de Kiseop. Eso lo hacía querer un poco más de él, pero como dijo el otro dijo antes, no podían en medio de la familia. Su bajo vientre ya estaba dando tirones y al parecer a Kiseop le pasaba lo mismo, al pedirle más y más rápido.

─AJ…

─Lo sé… ─le dijo este y lo besó nuevamente, las respiraciones agitadas, le avisaban que se acercaba el momento ─. Estoy a punto de…

─Hazlo más rápido… ─le exigió Kiseop y no dudó en hacerle caso.

Dando las últimas embestidas, los dos se corrieron en sus pantalones y gimieron lo más bajo posible para no levantar sospechas.

─Maldición… ─habló Kiseop ─. Tú me volverás loco.

─¿Loco de amor? ─AJ rió bajito y el otro le pegó en el brazo. Eso de enamorarse, no era el juego que Kiseop quería…

─Loco de nervios, diría yo…

Se quedaron acostados hasta que las respiraciones se calmaran y así, poder limpiarse y volver donde estaba la familia reunida.

Kiseop aún pensaba que todo eso era un error y que no debía llevarse por el corazón, solo con la mente. Romper su regla, sería demasiado arriesgado. «Solo piensa que es un juego, Kiseop», se decía mentalmente.

─Solo es eso… ─susurró.

─¿Qué cosa? ─preguntó AJ extrañado.

─Nada… Nada…

En lo prohibido by MKiSS [Stephanie P. Cortés V.] is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 4.0 Internacional License.
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